miércoles, 23 de septiembre de 2009

UNO Y UNO


Los músicos tocaban melodías acorde con la muestra. Un mozo con gran sonrisa sirve shot de pisco para los invitados. El altar puesto cuenta con una cámara fotográfica, un sketch con variedad de bocetos, limones, hojas de coca y velas adoran a la fotografía en la pared. Así nos recibe la instalación fotográfica de Nicolas Landa, Concreto y Abstracto.
Egresado de la Universidad de Lima expone sus fotografías encima de un yute pintado de manera abstracta. Este cuestiona el punto de vista propio y del espectador, haciendo una travesía en abstracción de la percepción y de la realidad. La búsqueda del balance entre lo Abstracto y lo Concreto. La expresión y el despertar. Estas imágenes reflejan, hablan por sí solas y sólo queda disfrutar el momento.
Fotografías de desnudo, fuego, nubes y sol resplandeciente son algunas de las que podremos encontrar en la exposición.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

CULPABLE, ES EL ÚNICO CULPABLE!


Sentado con las piernas cruzadas y con las manos apoyadas en ellas, vistiendo un pantalón azul, polo a rayas y un chullo de color marrón escuchaba atento su destino. Cerca de las 2 de la tarde en el Penal de Lurigancho empezó la lectura de la sentencia. Después de 17 meses de iniciado el juicio oral por el “andahuaylazo”, Antauro Humala fue sentenciado a 25 años.
Después de casi 2 horas de lectura de la sentencia, la Primera Sala Penal con Reos en Cárcel le impuso esa pena a Humala Tasso al hallarlo culpable de los delitos de homicidio calificado, asociación ilícita para delinquir, sustracción y tenencia ilegal de armas de fuego, rebelión, secuestro y daño calificado en agravio del Estado, de los policías y los secuestrados durante la asonada.
Se dispuso una reparación civil solidaria de 100 mil soles a favor del Estado, otra de 280 mil soles para cada uno de los herederos de las víctimas y 3 mil soles para cada uno de los policías que fueron secuestrados.
Su abogada, Rosario Montero, ha decido apelar la sentencia pues la califica de “débil” porque no existen pruebas que incriminen al líder etnocacerista de los delitos imputados. Así mismo, el patriarca de los Humala consideró que la sentencia impuesta a su hijo es “absurda y vergonzosa, propia de un tribunal delincuente”. Sostiene que sólo debió ser condenado por el delito de sedición, el cual establece, una pena de 10 años de cárcel, como máximo, y de 5 años, como mínimo.